En la década de los 80 en la ciudad de Nueva York, con el azote del sida asolando a la población, la sexóloga Barbara Carellas emprendió un reto: tener orgasmos sin ningún tipo de contacto físico. Poco a poco fue desarrollando su propia técnica de sexo mental basado en un control de ejercicios respiratorios muy similar a la meditación tibetana.

Asombrados por sus avances, científicos de la Universidad de Rutgers estudiaron su cerebro en pleno orgasmo de Barbara mediante la resonancia magnética. En ella se constató una reacción bioquímica de un orgasmo logrado sin más ayuda que un estímulo mental.

Pero, ¿cómo se puede lograr? «Casi siempre, afirmó el sexólogo Pedro Villegas, de modo más casual que como fruto de un entrenamiento previo y sin que se puede controlar de manera plenamente consciente, debido a que en el orgasmo influyen multitud de factores biológicos, psicológicos, medioambientales y sociales».

Por otro lado la psicóloga y sexóloga Carmen Bermejo compró mediante hipnosis cómo personas que nunca habían experimentado un orgasmo han sido capaces de lograrlo sin necesidad de contacto físico.

Y vosotros, ¿sois capaces de tener orgasmos sin ningún tipo de contacto físico?